aunque tímidamente, la superficie destinada a producción ecológica en Castilla yLeón continúa creciendo hasta sumar en 2015 más de 35.614 hectáreas, un 16,30% más que en 2014, año que se cerró con 30.621 hectáreas, cantidad similar a la que se registraba desde 2011.

Este significativo incremento se debe fundamentalmente a la incorporación de una masa de pinares de 4.039,81 hectáreas de pino piñonero en la provincia de Valladolid, propiedad del producto y elaborador Piñones Román Lorenzo y que, al considerarse el piñón como recolectado en una zona que crece espontáneamente en un espacio forestal, se puede considerar desde el principio como ecológica sin necesidad de periodo de conversión.

La mayor superficie de la producción ecológica corresponde al capítulo de cereales, leguminosas y cultivos industriales, con 14.606 hectáreas, seguida de zonas de pastos, praderas y forrajes, con 11.533. El tercer plantío en superficie corresponde al viñedo, que ha experimentado un importante crecimiento de un 34% en el último ejercicio (desde 2011 había permanecido prácticamente estable) al pasar de 2.173 hectáreas en 2014 a las 2.916 de la última campaña.

A nivel industrial, la Comunidad cerró 2015 con un total de 211 operadores ecológicos, un 17% más que en 2014. La mayoría –169– están vinculadas con la producción vegetal y las 42 restantes con la animal.

Por sectores, las bebidas (vino, sobre todo, pero también cerveza y derivados) acaparan el mayor número de sociedades del tejido productivo ecológico con 72 operadores inscritos, seguido de los transformadores de fruta y hortaliza, con 30 industrias, y los que trabajan en panadería y farináceos (panificación, galletas, confitería y pastelería) con 20. También hay cinco almazaras, cinco que producen azúcar, cacao, chocolate u otros dulces y nueve que procesan café, té y otras infusiones ecológicas.

En el campo de la producción animal, de las 42 empresas inscritas once se dedican a la producción de huevos, nueve a los lácteos y siete son mataderos y salas de despiece. También hay seis productores de miel, tres de embutidos y salazones y dos, en Ávila, que se dedican a la transformación de pescados, crustáceos o moluscos.